CARRUSEL

mi茅rcoles, 9 de agosto de 2017

Papa Francisco: Es triste que algunos cat贸licos se crean perfectos y desprecien al resto


El perd贸n como motor de la esperanza fue el tema que centr贸 la catequesis del Papa Francisco en una nueva Audiencia General en la que record贸 que la Iglesia est谩 formada por pecadores y critic贸 que algunos cristianos crean que son perfectos y desprecian a los dem谩s.

“Los pecadores son perdonados. No solamente vienen aliviados a nivel psicol贸gico porque son liberados del sentido de culpa. Jes煤s hace mucho m谩s: ofrece a las personas que se han equivocado la esperanza de unavida nueva, una vida marcada por el amor”, dijo el Santo Padre.

“Creo que muchos cat贸licos piensan que son perfectos y por eso desprecian a otros. Esto es triste”, afirm贸.

En su opini贸n, “nos hace bien pensar que Dios no ha elegido como primer material para formar su Iglesia a personas que no hab铆an errado nunca. La Iglesia es un pueblo de pecadores que experimenta la misericordia y el perd贸n de Dios”.

“Desde los inicios de su ministerio en Galilea, Jes煤s se acerca a los leprosos, los endemoniados, a todos los enfermos y los marginados. Un comportamiento as铆 (en aquella 茅poca) no era nada habitual, y es verdad que esta simpat铆a de Jes煤s por los excluidos, los ‘intocables’, ser谩 una de las cosas que m谩s desconcertar谩n a sus contempor谩neos”.

El Papa tambi茅n dijo que “all铆 donde hay una persona que sufre, Jes煤s se hace cargo, y ese sufrimiento lo hace suyo. Jes煤s no predica que la condici贸n de pena debe ser soportada con hero铆smo, a la manera de los fil贸sofos estoicos”, sino que “comparte el dolor humano y cuando lo hace, de su interior sale la actitud que caracteriza al cristianismo: la misericordia”.

Francisco asegur贸 que Jes煤s “abre los brazos a los pecadores” y manifest贸 que mucha gente “se encuentra hoy tambi茅n en una vida equivocada porque no encuentra ninguno disponible para mirarlo o mirarla de manera distinta, con los ojos, mejor dicho, con el coraz贸n de Dios, es decir, con esperanza”.

“Jes煤s ve una posibilidad de resurrecci贸n tambi茅n en quien ha acumulado tantas decisiones equivocadas”, a帽adi贸.

El Papa record贸 as铆 que “la Iglesia no se form贸 por hombres intachables, sino por personas que pudieron experimentar el perd贸n de Dios. Pedro aprendi贸 m谩s de s铆 mismo cuando cay贸 en la cuenta, al cantar el gallo, de que hab铆a renegado a su maestro, que cuando se mostraba superior a los dem谩s con sus 铆mpetus y formas espont谩neas. Tambi茅n Mateo, Zaqueo y la Samaritana, pese a sus fallos, recibieron del Se帽or la esperanza de una nueva vida al servicio del pr贸jimo”.

“Nosotros que estamos acostumbrados a experimentar el perd贸n de los pecados, quiz谩s a buen precio, deber铆amos alguna vez recordar cu谩nto ha costado el amor de Dios. Jes煤s no va a la cruz porque sana a los enfermos, porque predica la caridad, porque proclama las bienaventuranzas”.

“El Hijo de Dios va a la cruz sobre todo porque perdona los pecados, porque quiere la liberaci贸n total, definitiva del coraz贸n del hombre”, subray贸.

El Santo Padre tambi茅n explic贸 que Jes煤s “no acepta que el ser humano consuma toda su existencia con este ‘tatuaje’ imborrable, con el pensamiento de no poder ser acogido por el coraz贸n misericordioso de Dios”.

“Somos todos pobres pecadores, necesitados de la misericordia de Dios que tiene la fuerza de transformarnos y darnos esperanza cada d铆a” y “a la gente que ha entendido esta verdad b谩sica, Dios le regala la misi贸n m谩s preciosa del mundo, a saber, el amor por los hermanos y hermanas, y el anuncio de una misericordia que 脡l no niega a ninguno”.